Un emocionado Kevin De Bruyne se despidió de los aficionados del Manchester City mientras decía que esperaba que lo recordaran "con alegría".

El belga hizo su 142ª y última aparición en casa para el club en la victoria del martes por 3-1 sobre Bournemouth, quedando a centímetros de coronarla con un gol cuando golpeó el travesaño en la primera mitad, antes de una emotiva presentación en el campo después del partido.

Pep Guardiola también pudo ser visto llorando mientras se reproducían en la pantalla gigante videos de homenajes de excompañeros de equipo como Sergio Agüero, Fernandinho y Vincent Kompany, la leyenda del club Mike Summerbee y admiradores como Thierry Henry.

Los jugadores y el cuerpo técnico del City se alinearon para rendir un pasillo de honor a De Bruyne cuando salió al campo junto a su esposa Michele y sus tres hijos, y el jugador de 33 años tuvo dificultades para recomponerse cuando le pidieron que hablara por primera vez.

“Manchester es el hogar,” dijo De Bruyne. “Manchester es donde nacieron estos pequeños. Vine aquí con mi esposa Michele y no esperábamos estar aquí 10 años, hacer lo que hemos hecho como club, con los aficionados, mis compañeros de equipo.

"Hemos ganado todo. Hemos hecho al club más grande y ahora ellos van a tomar el control."

De Bruyne ha marcado 108 goles en 421 apariciones con el City, siendo el primer centrocampista del City desde Colin Bell en alcanzar cifras de tres dígitos, además de acumular 177 asistencias.

Durante sus 10 años en el club, De Bruyne se convirtió en el jugador más exitoso del City, ganando seis títulos de la Premier League, dos FA Cups, cinco Copas de la Liga, la Liga de Campeones, la Supercopa y el Mundial de Clubes.

"Quería jugar con creatividad, quería jugar con pasión," dijo. "Quería disfrutar del fútbol y espero, creo, que todos lo hayan disfrutado. Todos me impulsaron con fuerza tanto desde dentro como fuera del club para ser la mejor versión de mí mismo."

"Estos chicos que ves en la pantalla y estos chicos frente a mí me hicieron mejor de lo que era. Fue un honor absoluto jugar con ellos. Hice amigos para toda la vida y, ya sabes, todos juntos volveremos seguro."

Cuando le preguntaron cómo quería ser recordado por los aficionados, dijo: "Con alegría. Quiero entretener a la gente y ganar. Este equipo trabaja increíblemente duro, este equipo quiere ganar y ganará en el futuro conmigo o sin mí."

Antes del partido, el club reveló un mosaico y dedicó una calle en la academia del club a De Bruyne, y se anunció después del partido que también será homenajeado con una estatua fuera del Estadio Etihad, siguiendo los pasos de sus excompañeros David Silva, Vincent Kompany y Sergio Agüero.

El mosaico, instalado junto a un campo de entrenamiento en la City Football Academy, muestra una celebración de De Bruyne y fue revelado al jugador por el presidente del club, Khaldoon Al Mubarak, antes de la visita de los Cherries.

Creada por el artista local de Manchester y aficionado del City, Mark Kennedy, la obra es la última de una serie de homenajes a grandes del City, incluyendo a Silva, Kompany, Agüero, Yaya Touré, Joe Hart, Fernandinho e Ilkay Gündogan.