El capitán de Bath, Ben Spencer, declaró que "el cielo es el límite" después de que su equipo pusiera fin a una espera de 29 años para un título de la Premiership y asegurara un histórico triplete con una victoria de 23-21 sobre Leicester en el Allianz Stadium.

Leicester se quedó a un paso de un adiós de cuento de hadas para el medio scrum Ben Youngs y el pilar Dan Cole, quienes ambos han puesto fin a sus carreras tras esta temporada y fueron presentados después del descanso.

Bath resistió después de un último empuje de los Tigers que redujo la diferencia a dos puntos, a pesar de quedarse con 14 jugadores tras la polémica expulsión de Cole, gracias a un ensayo tardío de Emeka Ilione que aumentó la tensión en Twickenham.

"Sólo alivio, orgullo," dijo Spencer, cuando le pidieron resumir sus sentimientos. "Esto ha requerido mucho trabajo duro de muchas personas. Alivio no solo para mí, sino para los jugadores, el cuerpo técnico y los aficionados. Los aficionados son una parte fundamental de por qué me uní al club.

"Creo que el futuro de este club es increíblemente brillante, sin importar quién vista la camiseta. No puedo hablar lo suficiente sobre los chicos que están surgiendo. Su ética de trabajo es insuperable, y mientras mantengamos los pies en la tierra y el deseo de mejorar, el cielo es el límite para este equipo."

Los ensayos de Bath fueron obra de Thomas du Toit y Max Ojomoh en lo que se convirtió en una tarde brillante para Finn Russell de Escocia, quien superó las frustraciones iniciales para anotar 13 puntos, además de preparar la jugada para Ojomoh tras interceptar un pase desde su propia mitad.

Jack van Poortvliet abrió el marcador con un ensayo para Leicester, mientras que los ensayos en la segunda mitad de Solomone Kata e Ilione casi desatan una remontada.

Handre Pollard añadió tres transformaciones para Leicester, pero el apertura sudafricano ganador de la Copa del Mundo lamentará lo que podría haber sido tras un raro fallo en un penalti.

Los Tigers tuvieron dos jugadores enviados al banquillo de sanción: el capitán saliente Julian Montoya a finales de la primera mitad, mientras que la despedida de Cole terminó de manera poco ceremoniosa con una amarilla controvertida.

El director de rugby de Bath, Johann van Graan, dijo: "Todo nuestro enfoque esta temporada estuvo en ganar la Premiership. Nos dimos ese objetivo, lo mantuvimos dentro del círculo."

El entrenador sudafricano dijo que ahora haría una pausa para un momento de reflexión antes de centrarse en la próxima temporada.

Él añadió: "El día que te quedes quieto es el día en que alguien te alcanza. Siempre debes entrenar como si fueras el número dos porque los demás vienen detrás. Lo mejor está por venir."

El entrenador principal de Leicester, Michael Cheika – que será reemplazado por Geoff Parling – se irá este verano al final de su contrato de un año, además del hooker argentino Montoya, Pollard y el exjugador inglés Mike Brown.

Y aunque sintió que se metería en problemas por revelar lo que pensaba sobre algunas de las decisiones que fueron en contra de su equipo – prometiendo discutirlo con el jefe de arbitraje de la RFU, Paul Hull, como una "última broma" – Cheika estaba encantado con la resistencia de su equipo y sentía que el futuro del club era prometedor.

Añadió: "Siento que si podemos captar esas cosas intangibles relacionadas con la confianza y los estándares que necesitas tener para poder competir, entonces no pasará mucho tiempo antes de que ellos mismos estén en ese podio."